El dólar blue cotizó en los $200-. En el cierre la cotización del informal retrocedió a 199 pesos. Hubo intervención de la autoridad monetaria, que se desprendió ya de US$ 230 millones en lo que va de la semana.
El riesgo país está en 1.732 puntos, el valor más alto desde el cierre del canje.
En otra jornada de tensión financiera, el dólar paralelo alcanzó el precio psicológico de $ 200. Luego, el Banco Central vendió US$ 80 millones y el blue cerró la jornada en $ 199. La brecha con el oficial quedó en 99% y el riesgo país terminó en 1.732 puntos. Y habrá una nueva reglamentación para que los bancos no compren más dólares de los que podían adquirir hasta ahora. El Gobierno intenta así minimizar la crisis financiera antes de la elección.
A solo seis ruedas de las elecciones, el dólar blue tocó los 200 pesos por primera vez en la jornada de ayer (por el jueves 4/11/2021). En la apertura del mercado el informal avanzó un peso y se mantuvo en $ 200 hasta pocos minutos antes del cierre, cuando retrocedió a $ 199. Así, la brecha con respecto al tipo de cambio mayorista -hoy en $ 99,95- ya roza el 100%.
La cotización de $ 200 para el blue es el valor nominal más alto del año y muestra un incremento de 34 pesos desde el 2 de enero. A finales de octubre de 2020 el informal había tocado los $ 195, para luego desinflarse en las semanas siguientes merced al recrudecimiento del cepo cambiario hasta cerrar el año en $ 166.
Por el avance de la inflación en estos 12 meses aquellos $ 195 de octubre del año pasado representan una valor más alto que los $ 200 de hoy. Para equiparar esa cotización, el blue debería trepar a $ 270.
En las últimas dos semanas, el blue subió 12 pesos. La cercanía de los comicios del 14 de noviembre mete presión sobre el mercado cambiario y esto se hace sentir especialmente en las cotizaciones "libres".
En lo que va del año, la inflación acumula alrededor de 41%. El dato de octubre se conocerá la semana que viene, pero se espera que ronde el 3,5%, tal como ocurrió en septiembre.
Frente a estos números, el dólar luce "atrasado". Con el cepo reforzado, el dólar oficial se mueve apenas 1% por mes. Con esta estrategia, el Gobierno buscó -sin éxito- que el tipo de cambio se convirtiera en un ancla que frenara a la inflación. Pero con los movimientos de los precios de los últimos meses, el dólar quedó desfasado y acumulando tensiones.
"A una semana de las elecciones, como generalmente ocurre, la gente quiere estar cubierta frente a lo que pueda pasar con el tipo de cambio después de conocerse el resultado", señaló Nicolás Chiesa, director de Portfolio Personal Inversiones (PPI).
En este contexto, el Banco Central debió desprenderse de otros US$ 80 millones para contener las presiones sobre el tipo de cambio oficial. Esta semana las ventas de la autoridad monetaria ya llegan a US$ 230 millones. Además anunció ayer que acordó con los bancos que no comprarán divisas en los próximos días (ver más aparte).
Si bien las ventas del Central, junto con su intervención para controlar la cotización del contado con liqui y el dólar MEP, son efectivas para evitar saltos en el tipo de cambio oficial, la tensión continúa en los mercados alternativos.
"Hasta donde va a llegar el dólar blue depende de lo que va a pasar con el peso. Para el año que viene podemos esperar una inflación del 70%, e incluso a una de tres dígitos, con lo cual se puede duplicar el tipo de cambio", señaló Agustín Etchebarne, director de Libertad y Progreso.
"Es imposible predecir hasta donde va a llegar el tipo de cambio sin saber qué va a hacer el Gobierno. Lo que puedo decir es que vamos a un posible Rodrigazo y que la inflación de 2022 va a estar entre 70 y 100% anual", dijo Etchebarne.
Para Gabriel Caamaño, director de la Consultora Ledesma, "el dólar blue está corriendo de atrás a los dólares financieros libres, que ahora andan en torno a $ 214. No necesariamente los va alcanzar".
"En el fondo los precios de todos estos tipos de cambios paralelos están subiendo como resultado de la combinación de la liquidez inyectada en poco menos de 6 meses y la falta de anclaje de expectativas o definición de horizonte post electoral, lo que hace que los agentes busquen cobertura y estén dispuestos a pagar estos precios por ella", aseguró Caamaño.
Gran parte de la incertidumbre del mercado está relacionada con discernir el margen de acción que tiene el Gobierno.
"Si bien el ministro Martín Guzmán viene asegurando repetidamente que no va a acelerar el famoso crawling peg (la devaluación progresiva y controlada) que viene haciendo, todo indicaría que va a ser difícil seguir dos años más con esta brecha tan grande. Y esa incertidumbre generó mucha presión sobre los distintos tipos de dólar en estos días", apuntó Chiesa.
"En el corto plazo el Gobierno no puede hacer mucho para detenerlo porque tiene capacidad de intervención limitada", planteó Caamaño. Y agregó que el Gobierno "debería subir la tasa de interés y mostrar señales muy contundentes de moderación en gasto y emisión, cosa descartada antes de las elecciones. Incluso hay muchas dudas de que sea incluso posible después, de ahí la búsqueda de cobertura".
"Para calmar todo este tema se necesita credibilidad, algo que el Gobierno no tiene. Requeriría un cambio de gabinete y un acuerdo político. Si hubiera un gobierno con credibilidad habría que lanzar un programa de reformas estructurales e ir a un sendero de equilibrio fiscal en el mediano plazo", sostuvo Etchebarne.
Ayer, la portavoz del Presidente dijo que “el dólar blue no influye en la economía”.
Del lado del Gobierno la estrategia pasa por restarle importancia el tema. Gabriela Cerruti, portavoz del Gobierno, dijo en conferencia de prensa que el dólar blue "no influye en la economía".
"El dólar blue se maneja con sus propias reglas", respondió Cerutti ante una consulta acerca de si les preocupa la escalada. Y remarcó que el informal "refleja más expectativas políticas que económicas. En la economía los números son todos muy alentadores, así que esperamos que esto no influya en la situación macroeconómica como ya no viene influyendo".
A la escalada del blue se le agrega la de los dólares financieros. En el segmento controlado por el Central, el contado con liqui o CCL cerró en $ 180,6 y el MEP en $ 180,5, los dos con un alza del 0,3%. Pero en el SENEBI, por fuera de la intervención del Banco Central y sin restricciones en los montos semanales, el CCL "libre" cerró a $ 216.
La falta de avances en el acuerdo con el Fondo Monetario también potencia la incertidumbre económica y empuja al alza al riesgo país -el indicador de JP Morgan que mide la sobretasa que paga Argentina para endeudarse-. Aunque el indicador bajó 0,5%, a 1732 puntos básicos, sigue estando en el nivel más alto desde el canje de deuda del año pasado.