Nogoyá y Tala tienen menos habitantes que en 1960
El Censo nacional de Población y Hogares arrojó sus primeros resultados. El freno en la densidad demográfica en ambos departamentos se remonta a varias décadas.
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CAÍDA. DEPARTAMENTO NOGOYÁ TIENE 2.221 HABITANTES MENOS Y TALA 438, QUE HACE 50 AÑOS.
Daniel Caraffini / Redacción de UNO
Los resultados aún ínfimos y provisionales del Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010 ya mostró algunas realidades preocupantes en la provincia.
Una de ellas fue la caída del crecimiento de la población total, manteniendo la tendencia de las últimas décadas. Entre otras cosas, denota la imposibilidad de Entre Ríos de contener a sus habitantes, que buscan un futuro mejor por ejemplo en el sur, como se encargaron de marcar al fundamentar la suba demográfica en la Patagonia, sosteniéndose en migraciones internas desde el norte y la Mesopotamia.
Esa situación adquiere mayor gravedad en los departamentos Nogoyá y Tala, ya que el freno de sus densidades demográficas se remonta a varias décadas atrás.
Surgen entonces, muchos interrogantes y análisis pendientes por parte de las actuales y viejas autoridades de gobierno.
En el caso de Nogoyá, durante la primera década del siglo XXI sólo creció un 0,6%, muy por debajo del 6,7% promedio experimentado en la provincia, y del 13% en el país. Sólo sumó 238 habitantes en 10 años.
Pero ya en los últimos 30 años del siglo XX fue el Departamento con menor índice de crecimiento poblacional: de 1991 a 2001 aumentó un 4,3%; entre 1980 y 1991 el 4,4%, tres veces menos que el incremento entrerriano durante ese período; una década antes, entre 1970 y 1980, se habían sumado sólo ocho habitantes.
Sin embargo, la nota más cruda asoma al remontarse a 1960: en 2010, el Departamento tiene 2.211 nogoyaenses menos que 50 años atrás.
Algo similar acontece con Tala. Esa jurisdicción tampoco logró siquiera igualar la población que poseía en 1960. En aquel censo, hace 50 años, se habían registrado 26.636 habitantes; medio siglo después, en 2010, se contabilizaron 26.198 personas.
Las explicaciones habrá que buscarlas por distintos lados para entender, por ejemplo, porqué en las últimas décadas crecen a mayor ritmo los departamentos de la costa del Uruguay, que aquellos ubicados en la franja oeste entrerriana o en el centro.
El nivel de actividad económica y las oportunidades para jóvenes y adultos serán seguramente factores clave del pasado y presente.
A las autoridades provinciales y municipales les toca el turno de analizar, pero fundamentalmente planificar, para que el crecimiento y desarrollo sea equitativo y abarque a toda la entrerrianía.
El Censo nacional de Población y Hogares arrojó sus primeros resultados. El freno en la densidad demográfica en ambos departamentos se remonta a varias décadas.
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CAÍDA. DEPARTAMENTO NOGOYÁ TIENE 2.221 HABITANTES MENOS Y TALA 438, QUE HACE 50 AÑOS.
Daniel Caraffini / Redacción de UNO
Los resultados aún ínfimos y provisionales del Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010 ya mostró algunas realidades preocupantes en la provincia.
Una de ellas fue la caída del crecimiento de la población total, manteniendo la tendencia de las últimas décadas. Entre otras cosas, denota la imposibilidad de Entre Ríos de contener a sus habitantes, que buscan un futuro mejor por ejemplo en el sur, como se encargaron de marcar al fundamentar la suba demográfica en la Patagonia, sosteniéndose en migraciones internas desde el norte y la Mesopotamia.
Esa situación adquiere mayor gravedad en los departamentos Nogoyá y Tala, ya que el freno de sus densidades demográficas se remonta a varias décadas atrás.
Surgen entonces, muchos interrogantes y análisis pendientes por parte de las actuales y viejas autoridades de gobierno.
En el caso de Nogoyá, durante la primera década del siglo XXI sólo creció un 0,6%, muy por debajo del 6,7% promedio experimentado en la provincia, y del 13% en el país. Sólo sumó 238 habitantes en 10 años.
Pero ya en los últimos 30 años del siglo XX fue el Departamento con menor índice de crecimiento poblacional: de 1991 a 2001 aumentó un 4,3%; entre 1980 y 1991 el 4,4%, tres veces menos que el incremento entrerriano durante ese período; una década antes, entre 1970 y 1980, se habían sumado sólo ocho habitantes.
Sin embargo, la nota más cruda asoma al remontarse a 1960: en 2010, el Departamento tiene 2.211 nogoyaenses menos que 50 años atrás.
Algo similar acontece con Tala. Esa jurisdicción tampoco logró siquiera igualar la población que poseía en 1960. En aquel censo, hace 50 años, se habían registrado 26.636 habitantes; medio siglo después, en 2010, se contabilizaron 26.198 personas.
Las explicaciones habrá que buscarlas por distintos lados para entender, por ejemplo, porqué en las últimas décadas crecen a mayor ritmo los departamentos de la costa del Uruguay, que aquellos ubicados en la franja oeste entrerriana o en el centro.
El nivel de actividad económica y las oportunidades para jóvenes y adultos serán seguramente factores clave del pasado y presente.
A las autoridades provinciales y municipales les toca el turno de analizar, pero fundamentalmente planificar, para que el crecimiento y desarrollo sea equitativo y abarque a toda la entrerrianía.