«Es característica de estos gobiernos justicialistas escuchar y/o leer anuncios de obras que en realidad no se hacen»

(Prensa senador Vera). El senador nacional Arturo Vera (UCR-Entre Ríos), expresó su preocupación ante los nuevos avances de las investigaciones que “dejan cada día más claro el grado de alta corrupción que encierra la construcción de viviendas sociales impulsada por este gobierno que involucra y compromete a personas e instituciones, algunas con reconocido prestigio en el país”. El legislador dijo que “esto parece no tener fin, cada día se conocen detalles más alarmantes de las formas utilizadas para manejar el dinero público sin restricciones ni controles para ciertos personajes que se enriquecen a costa de los que más necesitan”.

Vera hizo referencia al modelo utilizado por el justicialismo en el gobierno para la construcción de viviendas sociales que “ha tenido como ejecutores principales de las casas a organizaciones sociales, siendo el caso más emblemático el de la Fundación de Madres de Plaza de Mayo, convertida en una de las constructoras de obras civiles más grandes del país. Este caso demuestra claramente que el objetivo de sostener esta forma de construir, no es solucionar el problema habitacional (con un déficit de más de 2 millones actualmente), sino por el contrario, cooptar a las organizaciones sociales que recibían este dinero a cambio de obtener apoyos irrestrictos a lo que llaman el proyecto K y naturalmente desviar dineros a privados, generando así una corrupción que difícilmente pueda medirse en términos económicos, pero se sospecha enorme”.

En ese marco Vera expresó, “es difícil creer que casi nada nos asombre en lo que da cuenta de corrupción y puesta en escena de obras que no se hacen, es decir en el montaje de la mentira han llegado tan alto que parecemos anestesiados y casi ilusionados de que en verdad algo se lleve a cabo”.

“Tomemos por ejemplo nuestra provincia de Entre Ríos, donde se dejó prácticamente de ver la construcción de barrios de viviendas sociales en estos últimos 7 años, dicha situación no debe asombrar a nadie pues es evidente que desde el momento que el gobierno justicialista concentró los fondos para la construcción en el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, Julio de Vido, lo hizo no para mejorar la eficiencia, sino para facilitar por un lado la concentración del poder del gobierno central, para regimentar gobernadores e intendentes por otro, para cooptar organizaciones sociales creadas y por crear, y fundamentalmente para facilitar el enriquecimiento ilícito de corruptos actores en la cadena”.

El senador nacional, aseguró, “sí es característica de estos gobiernos justicialistas escuchar y/o leer anuncios de obras que en realidad no se hacen, por ejemplo en Federal desde el inicio de la gestión justicialista en diciembre del 2003, solamente se ejecutaron 18 viviendas sociales de 40 que venían comprometidas del gobierno anterior y ahora anunciaron en plena campaña electoral, la construcción de 50 viviendas más, que de acuerdo a la tradición se parece más a un anuncio electoral que a la expresión de la voluntad política de realizarlas. Esto hace evidente entonces que no es su preocupación la falta de viviendas de las franjas populares que son las que necesitan estas soluciones, pese a que el financiamiento sigue produciéndose diariamente a través del pago de los impuestos a los combustibles que consumimos todos los argentinos”.

El senador de la Nación, acotó, “lo expresado por el justicialismo gobernante y particularmente en las campañas electorales de nuestro departamento, mal pueden hablar del déficit de la vivienda cuando son ellos los que lo sostienen y reproducen.

Tampoco podrían los candidatos justicialistas, atento al marco de gestión y respuestas que dan sus gobiernos provincial y nacional, hacer alusión al déficit de las redes cloacales en nuestros pueblos, cuando la legislación vigente le impone hacer esas redes troncales al gobierno provincial que lo desconoce.

En definitiva, son inoperantes e irresponsables en los más altos niveles del gobierno, por eso no hay escuelas, ni aulas, ni bancos suficientes para los alumnos, imponiéndoseles a los repitentes, la inscripción en las escuelas de los distritos del interior del departamento por la falta de espacio, lo que genera un nuevo gasto y problema para las familias al tener que procurarse transporte”.